Biblia Viva

...la Biblia de Jerusalén

II Macabeos 3, 1-5

1 Mientras la ciudad santa era habitada en completa paz y las leyes
guardadas a la perfección, gracias a la piedad y al aborrecimiento de mal
del sumo sacerdote Onías,

2 sucedía que hasta los reyes veneraban el Lugar Santo y honraban el
Templo con magníficos presentes,

3 hasta el punto de que Seleuco, rey de Asia, proveía con sus propias
rentas a todos los gastos necesarios para el servicio de los sacrificios.

4 Pero un tal Simón, de la tribu de Bilgá, constituido administrador
del Templo, tuvo diferencias con el sumo sacerdote sobre la reglamentación
del mercado de la ciudad.


5 No pudiendo vencer a Onías, se fue donde Apolonio, hijo de
Traseo, estratega por entonces de Celesiria y Fenicia,